La profesora Mireia López ha propuesto una actividad a los alumnos de 3º de la ESO: componer en clase un microrrelato, atendiendo a las características del género y con intencionalidad literaria. El objetivo era realizar una primera toma de contacto para comprobar la expresión escrita, pero algunos de los alumnos muestran sus dotes narrativas, como es el caso de D.P.R., de 3º ESO D. Os dejamos por aquí su composición.

Primeros días de clase, compañeros y maestros nuevos, clase de Lengua. Allí se encontraba Mario, atascado frente a un papel en blanco. La maestra esperaba que los alumnos escribieran un microrrelato para comprobar un poco su nivel pero al chico se le estaba complicando.

Miles de historias, anécdotas y frases sueltas pasaban por su mente, pero ninguna le parecía adecuada. Aquella del perro de su vecina era muy corta; tampoco sabía explicar lo que pasó en el supermercado con sus amigos varias tardes atrás. Los minutos pasaban y él solo había escrito su nombre en la parte superior del folio.

Entonces tuvo una idea, una vaga idea. No estaba clara, pero pudo conectar algunas palabras para ir comenzando el trabajo: «Primeros días de clase, compañeros y maestros nuevos, …».